Lo
escribí en
un libro del 1999 y lo pienso todavía: la web es
probablemente la máxima ocasión de democracia de la historia
de la humanidad. Pero ocasión no significa que una cosa se va a
realizar, depende siempre de las personas, es decir de
nosotros, que evidentemente tenemos muchos problemas con la web,
así como los tenemos con la democracia.
Facebook
y las otras redes sociales no son la web, sino clubes privados
con reglas suyas, donde todos, incluso los analfabetos tecnológicos,
puede entrar sin dificultad, encontrar mucha gente y hacer muchas
cosas. Pero no podemos pensar que
sean herramientas de trabajo efectivos. Desde el momento en
que muchos millones de personas están allí, su función
principal es, de cualquier modo, mover dinero. Y si necesitamos
herramientas
para trabajar, tenemos que construirlas.
Brescia, Italia, años 80 |
Si
la
web es difícil de entender y utilizar propiamente,
para mujeres y hombres acostumbrados a los libros
tradicionales
y sobre
todo a la televisión,
que tienen miedo cuando son libres de moverse, conectar, eligir, en
frente de una cantidad enorme de datos y posibilidades, las
redes sociales ofrecen recintos
protegidos donde
los activos pueden sentirse protagonistas con todas la palabras y las
imágenes que quieren, y los pasivos pueden también participar
simplemente mirando, o haciendo clic sobre el “me gusta”. Los
dos, igualmente, casi siempre no
salen del recinto.
Las
visitas al “post” dicen que alguien
ha visto lo que
uno ha escrito; no certifica que ha leído. El “me
gusta” no certifica tampoco, ni a
veces el compartir (muchos comparten sin leer). Los
comentarios significan una presencia
más activa pero, por ejemplo, comentar el link a un blog en facebook
no es como comentar en el blog mismo
(que viviría de
los comentarios, que
en la red social se pierden).
Ahora
que tenemos proyectos reales, como
La
Mirada de los Niños en el Mundo, que intentan desarrollarse,
marcar una presencia incluso con pocas palabras en un
grupo facebook, puede ser útil para que la gente se encuentre,
se conozca, y sepa que otros son interesados y participan.
Otras
herramientas para trabajar de verdad, hay que construirlas
en otras partes, en la web y sobre todo en el mundo real.